La Torá, patrimonio de TODOS

Parashat Terumá abre una serie de parshiot, desde esta semana hasta la finalización del Sefer Shemot, que se ocupan de la construcción del Mishkan, el Tabernáculo, y sus elementos. Ese mismo Mishkan que utilizaron nuestros antepasados en el desierto y también durante muchos años desde la entrada del pueblo a la tierra de Israel, en Shilo, en Mitzpá, en Givon, en Bet Shemesh, hasta que llegó a Ierushalaim. El mismo Mishkan que tenia todos los elementos, que no solo fueron utilizados durante la travesía mientras era un Tabernáculo portátil, sino también en el primer y segundo Templo de Jerusalem.

Ds le ordena a Moshe realizar cada uno de los elementos para el Mishkan, y lo hace utilizando un lenguaje particular:

“Veasita japoret zahav tahor…”, “Y harás una cubierta de oro puro…”

“Veasita shuljan atzei shitim…”, “Y harás una mesa de madera de acacia…”

“Veasita menorá zahav tahor…”, “Y harás un candelabro de oro puro…”

“Veasita nerotea shivá…”, “Y harás siete luminarias…”.

“Veasita et hamizbeaj atzei shitim…”, “Y harás el Altar de madera de acacia…”

Y así siguen desarrollándose a lo largo de esta parashá las instrucciones que el Creador le da a Moshe respecto a cada uno de los elementos que debía confeccionar para llevar a cabo los Korbanot.

Si prestamos atención, observaremos que cada uno de los elementos que Ds le ordenó confeccionar a Moshe es expresado en la Torá en singular “Y harás”. Solamente la orden de la fabricación de uno solo de los elementos no utiliza el mismo patrón y es expresado en plural, el primero de ellos en la lista: Veasu Aron atzei shitim…”, “Y harán un Arca de madera de acacia…”.

¿Por qué razón está expresado en plural?  ¿Por qué esta vez no dijo “Veasita”, “y harás” un Arca?

Lo entenderemos cuando leamos cinco versículos mas adelante: “venatatá el haAron et haedut asher eten eleja”, “Y dentro del Arca pondrás las Tablas del Testimonio”. En otras palabras, ¿qué es lo que iba a contener el Arca? Nada más y nada menos que la Torá. Para construir el contenedor de la Torá, el Aron Hakodesh, no ordenó Ds en singular, lo hizo en plural. Porque no es propiedad de uno solo, ni siquiera del gran Moshe Rabeinu. Es “najalat klal Israel“, es propiedad de todo Israel. No hay ningún tipo de monopolio sobre la Torá, le pertenece a todo el Pueblo de Israel en toda su extensión y en todas sus generaciones.

Y por eso la Torá en nuestra Parashá es precisa y pone énfasis, a diferencia de todas las instrucciones dadas en singular, en declarar que a la hora de construir el Aron Hakodesh, que contendrá la Tora, debe ser construido entre todos, en plural, en Comunidad.

Así lo ratifica la Tora misma en la última Parasha (Vezot Habrajá) “Torá tzivá lanu Moshe, morashá Kehilat Yakov”: “La Torá que Moshe nos ordenó es una herencia para (toda) la congregación de Iaakov (Israel)”.

Con cariño y afecto.
Shabat Shalom.
Fernando Lapiduz.
Referente Rabínico de la Congregación Masorti Bet-El, Madrid.