Parashat Maséi: olvídate del mientras tanto

Parashat Maséi nos cuenta sobre el recorrido del pueblo judío en su travesía por el desierto. Cuarenta y dos sitios en los que se detuvo Am Israel. Y no solamente lo menciona sino que la Torá cuenta que Ds ordenó a Moshé escribir esta lista.
Sabemos que en la Tora no hay una palabra, ni una letra, ni un espacio al azar. Cada cosa tiene su razón de ser.
Con mucha mas razón en este caso.

Por qué tiene tanta importancia mencionar y tomar nota de cada una de las paradas? Para que tienen que figurar?
Quizás podríamos pensar que es por una simple y lógica razón: para llegar del punto A al punto C tenemos que pasar por B. Y simplemente está escrito en la Tora que Israel pasó por el punto B por esa razón, era un lugar de paso.
Pero no, así no funciona la Tora.

Cuando la Tora se toma el tiempo de decir cada lugar en el que pararon, Ds le está diciendo a Am Israel que los quería en ese sitio en ese momento.
Esto no se aplica solamente para el recorrido de Am Israel sino que se aplica también para nuestras vidas.
Eso es lo que tenemos que entender, que nosotros, en nuestra propia travesía de vida, siempre estamos en el lugar correcto. Siempre estamos en el lugar en donde podemos alcanzar el máximo potencial.

Muchas veces cometemos el error de estar esperando a que llegue el momento ideal para hacer algo, “qué pase rápido esto para llegar a esto otro”, “cuando me gradúe todo será fantástico”,“cuando yo esté con esta persona entonces seré feliz”, etc.
Y es un error. La vida se pasa en el “mientras tanto”.

Ds nos dice que cada lugar en el que paras, que todos los caminos por los que pasas, cada lugar era y es el lugar correcto para sacar tu máximo potencial.
No esperes simplemente a pasar a través de la etapa, sino que tómalo como una maravillosa oportunidad para extraer el máximo de ese momento único.

Que así vivamos cada dia nuestra vida. Aprovechando cada paso que damos en que cada lugar que habitamos para vivir intensamente y plenos de sentido.

Con cariño y afecto.
Shabat Shalom.
Rab Fernando Lapiduz
Congregación Masorti Bet-El, Madrid.